Candance Payne es la famosa mujer que ha batido el récord de reproducciones en youtube gracias a sus risas con la máscara de Chewbacca que compró en la tienda Kohl’s.
La verdad es que es raro que estés leyendo esto y no hayas visto el famoso vídeo que ha destronado al mísmisimo Gangnam Style o a la propia Adele.
Esta madre de 37 años originaria de Texas (USA), como buena friki que es, decidió no gastarse su cheque regalo en ropa de deporte o juguetes para sus hijos y adquirir un producto de su saga de películas favorita que le llamaba la atención en uno de los estantes.
Quizás, por los más entendidos del universo Star Wars, la máscara de Chewbacca era ya conocida por sus habituales paseos en las cercanías de los cines de estreno, en las reuniones de fans o en la propia ComicCon, pero lo que está mujer hizo fue de lo más normal.
Y pasa lo que pasa….cuando algo no está forzado y la gente actúa con naturalidad, entonces los vídeos de youtube y facebook ganan audiencia a más no poder.
La chica pilló su máscara e intentó explicar en un vídeo cómo la había adquirido y lo que se sentía al llevarla puesta, pero al verse en el espejo y activarse el ruido gutural del personaje (el rugido de Chewbacca, se empezó a partir de una risa contagiosa y tonta que acabó en un desfase total de la muchacha.
Aquí puedes comprobar íntegramente lo que pasó, o bien, recordar lo que ya es historia en facebook y un poco menos en youtube:
Abierta la caja de pandora, la gente ha empezado a comprar máscaras hasta que se han agotado los stocks de las grandes cadenas como Amazon o Walmart. Vamos, que la fiebre por llevar una máscara ha hecho contagiosa una moda insospechada que estará con nosotros hasta bien entrado el verano.
Es sorprendente como muchas empresas invierten millones de dólares para que compremos sus teléfonos, sus relojes, sus servicios….y como una simple persona puede desatar una moda pasajera que arrasa en todo el mundo y hace publicidad gratis a Kohl’s, la tienda original dónde la adquirió y que, de momento, ya le ha regalado a Cadance miles de dólares en juguetes para sus hijos, además de las invitaciones a los programas de gran audiencia americanos para que vuelva a imitar al carismático personaje de la Guerra de las Galaxias, en idioma de mercado, Star Wars.
Por cierto, cuando creas que haces el ridículo, por si acaso, grábate en vídeo. En ocasiones, ser como uno es, es mejor que el postureo de selfies. ¡Adelante!